La silla debe adaptarse a ti, no tú a ella.
Dentro de los herramientas de trabajo, la silla es indispensable. Es la responsable de que tu cuerpo adopte una postura natural y puedas realizar las tareas de manera más eficiente. Además, pensar en el material de oficina como una inversión y no como un coste es fundamental ya que esta mejora tu bienestar e incrementa tu productividad.